El amor está en el aire

Los mitos del amor: ¿Has encontrado a tu media naranja?

Hoy vamos a hablar del mito de la media naranja o lo que es lo mismo, la creencia de que tenemos un alma gemela que nos está esperando y sólo con ella llegaremos a ser verdaderamente felices. Esa persona nos complementa, es nuestra otra mitad, estamos predestinados a estar juntos.

A lo mejor estás pensando que lo que acabo de contar es una idea muy cursi, consecuencia de un abuso de filmografía de Meg Ryan. Sin embargo, la media naranja no es un producto ‘made in Hollywood’; probablemente tenga su origen en el mito platónico de la androginia.

Platón, en ‘El Banquete’, habla de la existencia ancestral de criaturas de aspecto parecido al humano que contaban con cuatro brazos, cuatro piernas y dos rostros. Cuando estas criaturas trataron de subir al Monte Olimpo, Zeus les lanzó un rayo y las partió por la mitad, dando origen al género humano, y es por eso que cada uno vamos buscando nuestra otra mitad.

A menudo este relato se ha desvirtuado para dar a entender que las mitades que Zeus separó pertenecían a sexos opuestos. Sin embargo en la obra original de Platón se descubren también criaturas que tenían dos sexos masculinos y dos sexos femeninos y que fueron igualmente separadas por la ira de Zeus, por lo que el mito platónico daba cabida a la existencia de medias naranjas heterosexuales y homosexuales.

Desde el siglo IV antes de Cristo, generaciones de amantes han soñado con encontrar a su alma gemela y el cine no ha hecho sino explotar lo que ya formaba parte nuestra cultura amorosa.

¿Qué problema plantea el mito de la media naranja en relación a la construcción de relaciones de pareja sanas?

El principal problema de esta creencia es su relación con el destino. Todo lo que está relacionado con el destino nos sitúa en una posición pasiva. Podemos pasarnos la vida esperando a encontrar a la persona perfecta, o atrapados en relaciones que nos hacen sufrir bajo el pretexto de que es nuestra media naranja.

Seguro que alguna vez has oído a alguien relatar su historia de amor haciendo énfasis en el cúmulo de casualidades que les llevaron a conocerse y preguntándose qué hubiera pasado si en lugar de haber cogido ese tren se hubiesen decidido por el avión. Creo que puedo contestar a esa pregunta: hubiesen conocido a otra persona de la que se habrían enamorado y con la que habrían construido una relación. La capacidad de amar y comprometernos está en nosotros, cuando está, y si no está, entonces da igual el medio de transporte. La relación habría sido distinta porque cada pareja nos hace desarrollar unos aspectos de nuestra personalidad, mientras que deja otros dormidos. Lo explica muy bien Risto Mejide en un artículo fabuloso que lleva por título ‘Hoy tengo gamas de ti’: “Lo que sí te deja cualquier relación son más colores en tu paleta de sentimientos… Y uno va acumulando gamas. Y desarrollando matices. Y acumulando bocetos. Y trazos por esbozar.

No existen las almas gemelas, como dijo Nativel Preciado con motivo de las jornadas ‘Hombres, Mujeres: encuentros y desencuentros’ realizadas en la Fundación Telefónica: “No existe la media naranja, geográficamente no podemos ir a buscar la media naranja al fin del mundo, la tenemos al lado porque el amor se construye”.

No puedo estar más de acuerdo y, además, añado: una relación de pareja es mucho más que la suma de las personas que la forman, es el resultado de la interacción activa de ambos.

Para reflexionar:

  • Si no tienes pareja y deseas tenerla, sal a buscarla, adopta una actitud activa frente a tu deseo. No hay nada malo ni vergonzoso en ello.
  • Si la buscas pero te cuesta conectar con otras personas pregúntate por qué y si es necesario busca ayuda profesional.
  • Si tienes una relación de pareja que no te satisface, intenta averiguar por qué y buscar soluciones.
  • Si tienes una relación de pareja en la que estás satisfecha, enhorabuena a ambos. No es cosa del destino, consciente o inconscientemente vosotros estáis forjando vuestra propia felicidad.

RECOMENDACIONES LITERARIAS:

 

Esta publicación ha sido elaborada por Celia Arroyo y publicada en Instituto Palacios de Salud de la Mujer.

 


Foto: (CC BY 2.0 )- Love is in the air – Leidolv Magelssen

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